San Valentín: Amor mío ¿Me quieres? (1ª Parte)
Cuando se acerca el día de los enamorados hay personas que preparan este día con ilusión para demostrarle a su pareja el cariño y el amor que les une. En cambio para los que no tienen pareja (y echan de menos tenerla) o a los que están atravesando una ruptura les resultan días duros.
¿Tener pareja es bueno?
En principio tener una relación de pareja estable y deseada tiene efectos positivos para la personas que las vivimos ya que nos aportan bienestar personal. En cambio las relaciones de pareja deterioradas interfieren en la dinámica familiar y en la propia salud de los que las sufren.
Muchos hablamos del amor, pero ¿qué es el amor? ¿cómo explicar lo que siento? ¿hay formas distintas de amar?
El amor es un tema del que mucho se ha escrito, del que todos opinamos pero del que casi nadie tiene las cosas claras.
Por eso esta semana vamos a hablar del amor y de aquellos elementos que nos ayudarán a comprenderlo más allá de la experiencia personal de cada uno.
Son múltiples los estudios que se han realizado acerca de este tema. La visión aportada por. Stenberg me parece muy interesante. En su estudio acerca del amor determinó que en amor hay 3 elementos imprescindibles:
- La intimidad , implica la sensación de apoyo <<incondicional>>.
- El deseo se muestra en la sensación intensa de disfrutar con el otro de estar con la persona amada.
- El compromiso hace referencia al grado en el cual una persona está dispuesta a acoplarse a alguien y hacerse cargo de esa relación hasta el final, es el componente que le da estabilidad a la relación.
Vida en pareja: Dicutir de forma saludable
Es lógico que en una relación de pareja haya opiniones y puntos de vista diferentes que puedan dar lugar a discusiones acerca de temas más o menos importantes.
¿Conoces a una pareja que nunca haya discutido? Probablemente no, si conoces a alguna es porque probablemente alguno de los dos o bien por agradar a su pareja o bien por evitar el conflicto accede sistemáticamente a los deseos del otro.
Discutir se convierte en un problema cuando discutimos en exceso con nuestra pareja ya sea porque estas sean muy frecuentes o bien porque el tono sea inadecuado y acabe generando sensación de hartazgo, de que nuestra pareja nos limita o que se ha convertido en un desconocido con el que ya no tenemos cosas en común.
En una discusión es importante recordar que nuestro objetivo es entender a nuestra pareja, hacer que él o ella entienda nuestra posición y ser capaz de llegar a un acuerdo satisfactorio, en la medida de lo posible para ambas personas. Si nuestro deseo es únicamente desahogarnos, recordar a la otra persona sus defectos y demostramos nuestra incapacidad para escuchar “la gran bronca está asegurada».
¿Quieres discutir de forma productiva?
Entonces recuerda:
- Te voy a decir que hecho o comportamiento en concreto te ha molestado en ese momento, olvida aquellas otras ocasiones en las que se comportó así.
- Trátale con respeto, no lo descalifiques, insultes o demuestres gestos de desaire (hay gestos que duelen más que las palabras).
- Escucha su punto de vista. Con cierta frecuencia nos molestan comportamientos de nuestra pareja por la interpretación que hacemos de ellos y si nuestra pareja nos da sus razones quizá cambiemos de opinión. En caso contrario será más sencillo explicar nuestro punto de vista.
- Trata de explicar lo que piensas y cómo te hace sentir el conflicto.
- Pregúntale qué piensa y cómo se siente él, no hagas de adivino.
- No interrumpas.
- Si te has equivocado reconócelo.
- No olvides las cosas que tu pareja hace que te gusta y díselo con frecuencia.
- No chilles.
10. No dejes de hablar. Si estás muy alterado pide a tu pareja posponer la discusión a un momento en el que ambos os encontréis más tranquilo.
Psicólogo Salamanca – Terapia de pareja – Psicoterapia Salamanca
Discutimos ¿Quién gana?
Podemos discutir de muchas formas. Podemos tratar de entender a nuestro “contrincante” y acercar posturas, o podemos tratar de hacer daño y desarmar a nuestra pareja como si fuese nuestro enemigo.
Cuando discutimos de forma hiriente, solo puede haber perdedores.
En ocasiones, podemos ser tan hirientes en las discusiones que hay personas incapaces de olvidar aquella frase o comentario que tanto daño le hizo, frase que puede salir a relucir en próximas discusiones o incluso provocar la ruptura.
Con frecuencia oímos hablar de violencia de género y de cómo hay relaciones de pareja basadas en la dependencia emocional, el control y la violencia. Pero recordemos que hay múltiples formas de ejercer la violencia. Hay personas que agreden físicamente a sus parejas. Parece que la mayor parte de la sociedad está de acuerdo en la necesidad de acabar con esta forma de violencia, pero hay otras formas de violencia que existen y no se ven a simple vista.
Si bien es cierto que la mayor parte de las personas en las discusiones con sus parejas somos capaces de controlar nuestra agresividad física tenemos mayores dificultades para controlar nuestra agresividad a nivel verbal.
Estar inmerso en una relación personal cargada de agresividad verbal ya sean reproches o insultos, con alta probabilidad acabará teniendo problemas de ansiedad o depresión y su autoestima se verá mermada. Pero también podemos agredir sin palabras, sin ninguna palabra, largos días de silencio en una pareja tiene un efecto devastador propiciando que aparezcan sentimientos de culpa y desprecio a uno mismo o a nuestra pareja.
Mañana nos adentraremos en como discutir de forma efectiva, tratando de no herir y, sobretodo de solucionar el conflicto.
Psicologo Salamanca – Psicoterapia – Terapia de pareja
Discusiones de pareja
Son muchas las ideas preconcebidas que hay acerca de las relaciones de pareja.
Hay quien piensa que tenemos que encontrar nuestra “media naranja” y que sin esa otra parte no somos personas completas, otros piensan que tenemos que encontrar a alguien muy parecido a nosotros para no discutir, otro que los polos opuestos se atraen…
Las personas somos seres completos, no necesitamos otra “mitad” para poder sentirnos realizados y satisfechos con nuestra vida, de hecho sentir “que necesitamos” una pareja conlleva muchos riesgos como engancharnos a relaciones de pareja tóxicas.
Discutir, la mayor parte de las parejas lo hacen con mayor o menor frecuencia.
El problema es que a veces cuando discutimos, nuestro objetivo no es llegar a acuerdos con nuestra pareja sino imponer nuestro criterio a toda costa, a veces ni siquiera estamos escuchando.
Nuestro comportamiento social se modifica en función al ambiente. Con desconocidos, o personas de poca confianza podemos “discutir” con serenidad y buenos argumentos, pero a veces esto es mucho más complicado con las personas que convivimos.
Los psicólogos que han estudiado las discusiones de pareja coinciden que la mayor parte de esas disputas tienen un transfondo de lucha de poder.
Recuerda la última discusión fuerte que tuviste con tu pareja…cuando la discusión está en su punto máximo ¿eres capaz de aceptar unas disculpas? Muchas personas probablemente responderían que no. Es esos momentos queremos que nuestra pareja ceda ya sea aceptando que está equivocado o generando un compromiso de cambio en su comportamiento o actitud. Con frecuencia nos cuesta entender a nuestra pareja, ponernos en su lugar y tratar de acercar puntos de vista.
¿Quién puede hacernos sentir mejor que quién mejor nos conoce? ¿Quién puede generar más dolor que quien además de tener buena capacidad de argumentación conoce nuestros puntos débiles?
Estos días seguiremos hablando de este tema. Trataremos de ver algunas claves que nos ayuden a discutir de forma más constructiva.
Psicoterapia- Trastorno adaptativo (III)
Hoy vamos a seguir profundizando en el trastorno adaptativo, veremos algún ejemplo de cada tipo. ¿Preparados?
. Trastorno adaptativo con estado de ánimo depresivo, en este caso los síntomas más recurrentes son el estado de ánimo depresivo, el llanto o la sensación de desesperanza, es decir, la sensación de que las cosas no mejorarán. Lucía y Marta son amigas y compañeras de piso. Hace dos meses Lucía se trasladó a Madrid por motivos laborales, desde entonces Marta se siente muy sola y cuando llega a casa del trabajo se le cae la casa encima. Llora con frecuencia y le cuesta hacer las tareas más básicas de la casa. No acaba de entender por qué se siente así, más sabiendo que para su amiga es una gran oportunidad.
. Trastorno adaptativo con ansiedad, en este caso la persona presenta fundamentalmente sintomatología ansiosa como nerviosismo, preocupación o inquietud. En el caso de los niños, es frecuente la aparición de miedo a la separación de sus padres o familiares más allegados. Lucía, la amiga de Marta acaba de mudarse a Madrid al lograr el puesto de trabaja que lleva tanto tiempo soñando. A pesar de la ilusión que le hacía el cambio tiene mucho miedo a fracasar, por lo que dedica la mayor parte de su tiempo a trabajar, hasta el punto que ha dejado de tener tiempo para sí misma y le cuesta mucho concentrase en otras tareas. Esta última semana casi no ha podido dormir.
. Trastorno adaptativo mixto, en estos casos coexisten la sintomatología ansiosa con la depresiva.
. Trastorno adaptativo con trastorno de comportamiento en este caso lo relevante es que la persona modifica sus patrones de comportamiento habituales siendo frecuente la violación de los derechos de los demás o de las normas y reglas sociales apropiadas a la edad. La persona podría comportarse de forma vaga, podría conducir de forma irresponsable, meterse en problemas o incumplir sus responsabilidades legales. Luis acaba de mudarse del pueblo a la ciudad ya que a a estudiar la carrera. Sus padres deciden que le será más fácil conocer gente y adaptarse si va a una residencia de estudiantes. Allí ha conocido a un grupo de chicos y chicas que salen mucho de fiesta, llegan a altas horas y no cumplen con sus responsabilidades académicas. Luis quiere integrarse en el grupo, por lo que acaba consumiendo drogas y metiéndose en peleas. Cada vez se encuentra peor y no sabe como salir de este lío.
. Trastorno adaptativo con alteración mixta de las emociones y el comportamiento, en este caso aparecen cambios importantes tanto en las emociones que experimenta la persona como en su comportamiento. Marcos tiene 6 años, su padre se ha ido hace un mes al extranjero a trabajar debido a la crisis, desde entonces Marcos se muestra caprichoso e irascible, teniendo rabietas frecuentes, cuando hasta ahora se había mostrado como un chaval tranquilo. Sus profesores comentan a la madre que últimamente se mete en peleas y le ven más aislado en el colegio.
. El trastorno adaptativo no especificado, en este caso aparecen reacciones desadaptativas variadas que no pueden incluirse en las categorías anteriores como podría ser el tener multitud de molestias físicas (somatizaciones), el presentar comportamientos de aislamiento social o la inhibición en el ámbito académico o laboral.
Psicoterapia Salamanca – Gabinete de Psicología Mª Luz Cañadas – Adultops